¿Te preocupa el futuro? ¿y si sanas tu pasado?

Negocios

El futuro es incierto, eso lo confirmamos en 2020, lo único que podemos hacer es estudiar, aprender y organizarnos, no para estar “preparados” para lo que venga, pues no sabemos qué es, sino para estar mejor equipados. El futuro, es el futuro pero ¿y el pasado?

Si volvieras a empezar tu negocio ¿qué harías diferente hoy? ¿qué debes sanar? Y con sanar, no hablamos de borrar errores, pues los errores nos ayudan a crecer. Hablamos de corregir rasgos profundos que hemos dejado de lado por falta de tiempo, o por que si. 

¿El desorden? ¿los procesos? ¿tienes taller propio y no está dando los frutos que esperas, pero por orgullo no lo cierras? ¿estás “cómodo” con tus proveedores así sepas que no son los ideales? ¿sabes que necesitas contratar personal pero lo has aplazado? ¿qué hay que sanar, arreglar, o reparar?

Quizás creaste tu empresa con un propósito que finalmente se reveló no ser el adecuado y ahora que sí sabes qué quieres hacer, debes corregir partes de tus procesos y tu narrativa para estar en línea con lo que quieres para el futuro. 

Más sentimientos, más emociones, más humanidad y más realidad. Vivimos cambios muy drásticos y aunque suene repetitivo, evolucionamos en un año, lo que debía tardarnos 10, estamos re-aprendiendo todo de nuevo, pero hay que hacerlo con pasión y convicción.  

Todo en la vida son ciclos, se acaban unas cosas y empiezan otras. Todos los años, tomamos el ciclo que acaba y lo usamos como un ladrillo para construir el nuevo ciclo que comienza, asegúrate que esos ladrillos que estés usando estén lo suficientemente sólidos para seguir. 

No empieces a construir un 2021 con bloques averiados, ¡arréglalos! ahora es cuando. Ese futuro que tanto anhelamos o al que tanto le tememos, es la sumatoria del pasado y el presente.