Es el término en inglés utilizado por los mercadólogos para definir a las personas que viajan para comprar. Hasta ahora, esta actividad beneficiaba a los lugares sin impuestos o las "mecas" de la moda, como Panamá, Colombia o Europa, donde regresan el impuesto a los viajeros. 

Pero ahora, el término toma un nuevo significado. ¿Y si hiciéramos eventos de compras itinerantes con ofertas sumamente atractivas en producto y la promesa de una experiencia? 

Si hay retiros de yoga, vacaciones temáticas y más, ¿Por qué no apostar por eventos de venta DTC para públicos selectos? ¿Y si se hace en un hotel? ¿Todo incluido? ¿Y si llevamos a los clientes a las fábricas? ¿Y si ofrecemos personalizados?

Y es aquí donde el valor que le da el cliente a la marca toma un nuevo nivel. ¿Cuántos clientes tienes que viajarían por ti? ¿Qué le puedes ofrecer a estos clientes que sea diferenciador y le de valor a la experiencia?

Y por último, ¿Qué experiencias busca TU cliente? ¿Qué experiencias puede ofrecer TU marca? ¿Qué marcas afines tienes con las que se puedan organizar alianzas, eventos, retiros, DESTINATION SHOPPING? 

Esta fue una de las preguntas con las que iniciamos los cursos de Manual de moda. ¿Tienes una marca o tienes “solo” una empresa? 

Una empresa, es una unidad productiva que desarrolla una actividad con fin de lucro, es decir, generar dinero. Y una marca es un signo distintivo que individualiza y diferencia a las empresas, servicios y productos. 

¿Tienes marca o empresa? En un panorama ideal, debemos tener las dos, pues una marca es una empresa, si está posicionada, y una empresa con una marca es más rentable. 

Entonces ¿Cómo puedo crear, reforzar o verificar mi marca? 

 1). Tener una meta clara. ¿Por qué creaste o quieres crear esta marca? ¿Es porque quieres ser reconocido por algo? ¿Para vender más? ¿Porque es algo único? ? ¿Es tu pasión? ¿Qué esperas lograr o obtener de esta marca en 1 y 5 años?

 2). Las fortalezas. ¿En qué eres (o tu empresa) bueno? Lo mejores negocios nacen de reconocer en nosotros mismos, las virtudes y dones que tenemos y por los que los demás pagarían. 

 3). Comunicación. ¿Qué tienes para decir? ¿A quién? ¿Les interesa? y ¿CÓMO lo dices? Esto es la clave de la singularidad. 

Evalúa tu marca, tu empresa y establece con estas preguntas, cómo crear, o fortalecer tu marca. 
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¿Te has dado cuenta de los cambios recientes de Instagram? Y no, no hablamos de si ha bajado o subido el engagement, ¡Hablamos del algoritmo! 

Ahora, en el feed de cada persona, cuando se meten a navegar en la red social, cada dos publicaciones de cuentas a las que siguen usualmente sale una publicidad. Pero…

¡Cada dos publicidades, sale una cuenta de sugerencia! Es decir, Instagram trajo su “discovery” o el descubrimiento de cuentas al feed. 

¿Cómo esto nos beneficia? Por el conocimiento que tiene la red social sobre tu cuenta y tus seguidores, le puede mostrar orgánicamente tu contenido a nuevas personas, ¡Adquisición gratis de clientes potenciales! 

PERO, ¿Qué pasa si tu contenido es solo de venta, es aburrido o no conecta? Cuando te muestren en el discovery, nadie hace click y el algoritmo deja de mostrarte, pues no cumples con el objetivo de ellos: Lograr que las personas pasen más tiempo en la red. 

Entonces, ¿Tienes tu estrategia de comunicación clara? ¿Tienes un balance de contenido de marca, esencia y producto? 

¡Aprovecha los beneficios! No te pierdas de oportunidades por errores internos, o por no utilizar bien la red.

Es una frase que he escuchado desde que era chiquita, quizás porque crecí en el trópico entre palmeras, pero lo cierto es que esta analogía aunque se entiende el mensaje, no es del todo cierta, solo por si acaso, una palmera se demora 1 año para crecer 1 metro, y se demora hasta 5 años en dar cocos. 

El hecho es que se entiende que lo que crece rápido, cae rápido, entonces ¿Estás creciendo muy rápido? ¿Cuáles son tus bases?

OJO, crecer “rápido” no es malo, siempre y cuando esté soportado en bases duraderas, crecer rápido, a punta de inversión, es insostenible y eso es lo que desafortunadamente estamos viendo hoy en día con “unicornios”, con Silicon Valley, con las marcas de influencers en USA, etc. 

¡Evalúate! ¿Cuál es tu “base” de crecimiento? tu super poder, tu arma secreta, ¿Es sostenible y escalable en el plazo largo? Si sí, ¡Perfecto! Si no, no hay problema, solo empieza a pensar en los cambios necesarios para convertir tu estrategia de finita a infinita.

¿Creces o te mantienes por lo que eres y por tu producto? ¿O por lo que inviertes? ¿O por la imagen que presentas que puede, o no, ser real? 

Según un estudio reciente realizado por VC Corp en Estados Unidos, los emprendimientos con sus colaboradores y empleados en la oficina, facturan hasta 3,5 veces más que los que trabajan a distancia. 

Este estudio se realizó entre 45 empresas en etapa semilla y 45 empresas con entre 2 y 5 años en el mercado. La mayoría de ellas con entre 2 y 10 empleados. 

OJO, este es solo un estudio, no es la verdad absoluta, pero como en todo, si lo vemos desde un ángulo diferente al evidente, podemos tener dos conclusiones: 

 1) El trabajo presencial motiva las relaciones humanas, y de estas relaciones e interacciones crean nuevas ideas, una cultura de empresa y más beneficios. 

 2) El trabajo remoto mejora significativamente la calidad de vida de los trabajadores y sus familias. 

 3) Todo tiene puntos medios, así que suma 1 y 2 y saca tus propias conclusiones. 

¿Las nuestras? Todo el equipo de Manual de moda trabaja remoto, pero tenemos una política de comunicación diaria, al inicio y al final de la jornada. Además tenemos una newsletter interna con artículos de interés general, que cada semana la hace una persona diferente del equipo y después discutimos los temas. ¿Notas una diferencia? 

El aislamiento o la separación física no necesariamente significa la falta de interacciones racionales o emocionales, está en ti evaluar formatos, tomar decisiones y crear sistemas.

Siguiendo en la línea de los esfuerzos aislados, muchas veces en las empresas se peca por exceso y por falta. Exceso de planeación y falta de implementación. 

“El papel puede con todo”, es una frase odiosa pero real. Podemos hacer reuniones, tener citas con expertos y dejar todo el plan establecido, que sin la implementación, no estamos haciendo nada, solo frustrarse, entonces: 

 1) Una buena estrategia debe ser sencilla, debe venir acompañada de un plan de acción de fácil implementación. 

 2) Evita tener una larga lista de prioridades. Una estrategia, para una empresa micro, pequeña o mediana debe responder a uno o máximo dos objetivos no más.

 3) Escoge el equipo adecuado. Un equipo no es mucha gente, un equipo pueden ser dos personas, o una persona y un freelancer. Lo importante es saber quién hace qué y en qué tiempos. Si eres tú solo, organízate. 

 4) Una estrategia sin un plan de implementación es solo un sueño. Y un plan de implementación sin una estrategia clara es solo una lista de cosas por hacer. 

Ahorra tiempo, canaliza los esfuerzos y avanza de una mejor manera. Plantea un objetivo, crea una estrategia para este objetivo, idea un plan de implementación y asigna las tareas a tu equipo o a tus días, ¡Así se trabaja mejor! 
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